jueves, 19 de febrero de 2009

Breve presentación del autor.

Nací en Palma de Mallorca (España) posteriormente a una colisión nuclear programada en Japón. El caos me concretó en sagitario con la poderosa luna en cáncer, en el horóscopo chino soy gallo y en el tibetano pájaro.

Mis antepasados proceden de Luchau-Sachsen (Alemania) Kärnten (Austria) Gdansk (Polonia) Lares (Puerto Rico) y Génova (Italia) y en lo que concierne a España: País Vasco, Cataluña y la isla de Mallorca.

Me siento orgulloso de esta enriquecedora mezcla genética, colindante a una nueva raza, por darle un nombre, y tal como si fuera un visionario, diré raza cósmica.

Por la identidad del lugar de mi nacimiento, dicen que soy mallorquín, aunque en mi fuero interno no me siento de ningún lugar.

Y es por ello que valoro el dialogo intercultural. Pienso, que la identidad del individuo no se basa en el país en que ha nacido, ni en el idioma, ni en la raza, ni en la clase social, ni en la religión o cultura, ni en el nivel de inteligencia alcanzado. “Se basa en el Yo y la esencia que contiene”.

Considero que el ser humano debe ser guiado y conducido a través de los caminos de su propia mente, por la consideración y discusión de los temas, hasta llegar a un punto en que el noúmeno “Poder divino sobrenatural” en él, empiece forzosamente a vibrar y a iniciar la vida y la conciencia (Dr. Rudolf Otto, autor de The Idea of the Holy)

Lo determinado es sectario en cualquier idea, opinión o creencia.

Se puede encontrar mucha más verdad en los razonamientos que a uno le importan, siempre que no sean por interés hacia uno mismo, que en la lectura de numerosos libros.

El pensamiento interno o voz de la conciencia universal, se convierte en externo cuando llega el momento (Ralph Emerson, místico y poeta)

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